El cuerpo necesita energía para funcionar, y esta energía la consigue de los nutrientes que obtiene a través de los alimentos que ingerimos. La pregunta que nos surge ahora es...
¿En qué alimentos se encuentran los nutrientes necesarios?
Los alimentos más ricos en hidratos de carbono, son los cereales integrales, los más conocidos son el arroz, maíz, trigo, cebada, centeno, avena, y algo menos conocidos, el mijo, amaranto, quinoa, teff, y sus derivados, harinas, sémolas, pastas, pan. Las legumbres, semillas, frutas y verduras, también son fuente de hidratos de carbono.
Los productos de origen animal ricos en proteína son la carne, el pescado, huevos y lácteos.
La fuente de proteína de origen vegetal por excelencia son legumbres, como los garbanzos, judías, lentejas, guisantes, azukis, soja y sus derivados (tofu y tempeh), en combinación con los cereales. Semillas (girasol, calabaza, sésamo), frutos secos, frutas y verduras tienen proteínas.
Las grasas saturadas se encuentran mayormente en los productos de origen animal (lácteos, huevos, carne roja), mientras que las grasas insaturadas son generalmente de origen vegetal y las encontramos en mayor proporción en semillas, frutos secos, aceites y pescados.
Se deben tomar en pequeñas cantidades, ya que a igual cantidad de hidratos de carbono y proteínas, generan más del doble de energía que ellos.
Tienen funciones de regulación muy importantes. No nos aportan energía y se necesitan en muy pequeña cantidad, son los llamados micronutrientes.
Están presentes en todos los alimentos, principalmente en frutas y verduras.
También las algas, consideradas como verduras de mar, son una interesante fuente de vitaminas y minerales.